¿Qué es la violencia económica y patrimonial?
La violencia económica se da cuando una persona ejerce control sobre los ingresos, los bienes o el acceso a recursos de otra, con el objetivo de restringir su independencia. Puede manifestarse de diversas maneras:
- Impedir que la víctima acceda a su propio dinero o bienes.
- Obligar a depender económicamente del agresor.
- Controlar ingresos, tarjetas de crédito o cuentas bancarias.
- Imponer decisiones financieras sin el consentimiento de la otra persona.
- Negarse a pagar una cuota alimentaria o utilizar bienes compartidos para generar perjuicio.
Por otro lado, la violencia patrimonial implica la sustracción, retención o daño intencional de bienes de la víctima. Algunos ejemplos incluyen:
- Destrucción de bienes personales o documentos importantes.
- Ocultamiento de herencias o bienes gananciales.
- Manejo fraudulento de propiedades o cuentas bancarias.
- Impedir la administración de bienes propios.
¿Quiénes pueden ser víctimas de violencia económica?
Este tipo de violencia afecta a diversas personas en distintos ámbitos:
- En las relaciones de pareja: Se da cuando un cónyuge o conviviente controla los recursos del otro o lo obliga a depender económicamente.
- En la tercera edad: Muchos adultos mayores son privados de su dinero, pensión o bienes por parte de familiares o cuidadores.
- En el ámbito laboral: Puede presentarse cuando un empleador no paga salarios, niega derechos laborales o ejerce control económico sobre un trabajador.
- En el marco familiar: Ocurre cuando se impide a una persona acceder a bienes que le corresponden, como una herencia.
Medidas legales para combatir la violencia económica y patrimonial
Existen diversas herramientas legales para proteger a las víctimas y garantizar la restitución de sus derechos:
- Denuncia ante organismos competentes: Las víctimas pueden acudir a comisarías, fiscalías o unidades especializadas en violencia de género para radicar una denuncia.
- Órdenes de protección: Los jueces pueden dictar medidas que impidan al agresor administrar bienes ajenos o acceder a cuentas bancarias de la víctima.
- Acciones judiciales por incumplimiento de cuota alimentaria: En caso de retención o falta de pago de alimentos, se pueden solicitar embargos, multas o sanciones.
- Reclamos en el ámbito civil: Si hubo perjuicio patrimonial, se pueden iniciar demandas para la restitución de bienes o indemnización por daños y perjuicios.
- Protección en el derecho de familia: En el contexto de divorcios o separaciones, se pueden solicitar medidas para evitar el vaciamiento de bienes.
Cómo actuar si se es víctima de violencia económica
- Registrar pruebas como mensajes, recibos de sueldo, estados de cuenta o cualquier documento que demuestre la restricción o apropiación indebida de bienes.
- Buscar asesoramiento legal para conocer las opciones disponibles.
- No ceder a presiones ni manipulaciones que afecten la autonomía financiera.
- Solicitar apoyo en redes de contención o programas de asistencia.
La violencia económica y patrimonial es una forma de control que vulnera derechos fundamentales. La ley ofrece herramientas para combatir estos abusos y garantizar que las víctimas puedan recuperar su independencia y bienestar.
2025-07-11