22 de octubre: Día del Derecho a la Identidad

22 de octubre: Día del Derecho a la Identidad

22 de octubre: Día del Derecho a la Identidad

El origen de esta conmemoración está profundamente ligado al dolor y la esperanza. Durante los años de la dictadura, cientos de bebés fueron separados de sus madres y entregados a otras familias, muchas veces vinculadas al régimen, con identidades falsas y documentos apócrifos. Frente a este crimen, un grupo de mujeres —las Abuelas— comenzó una búsqueda sin precedentes, reclamando al Estado el derecho de esos niños a saber quiénes eran y a recuperar su verdadera historia. Ese movimiento marcó un antes y un después en la defensa del derecho a la identidad como un valor jurídico y moral.

El 22 de octubre no fue una fecha elegida al azar. Ese día, en 1977, las Abuelas de Plaza de Mayo realizaron una de sus primeras manifestaciones públicas, visibilizando por primera vez el reclamo por sus nietos desaparecidos. La instauración oficial del Día Nacional del Derecho a la Identidad, casi tres décadas después, fue un reconocimiento institucional al rol fundamental de estas mujeres y una reafirmación del compromiso estatal con la búsqueda de la verdad.

Desde el punto de vista jurídico, la Constitución Nacional y diversos tratados internacionales de derechos humanos consagran el derecho a la identidad como un principio básico. El artículo 7 de la Convención sobre los Derechos del Niño, incorporada con jerarquía constitucional, establece que todo niño tiene derecho a un nombre, una nacionalidad y, en la medida de lo posible, a conocer a sus padres y ser cuidado por ellos. En Argentina, este principio se traduce en políticas públicas y herramientas concretas, como el Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG), creado en 1987, que permite identificar a las personas nacidas durante el terrorismo de Estado mediante análisis de ADN.

Hasta el día de hoy, más de 130 nietos y nietas han recuperado su identidad biológica, un logro que combina la ciencia, el derecho y la memoria histórica. Sin embargo, el trabajo continúa: todavía hay casos sin resolver, y cada restitución representa no solo la reparación de una vida individual, sino también un acto de justicia colectiva.

Con el paso del tiempo, el concepto de identidad se amplió más allá de la filiación biológica. Hoy también abarca la identidad de género, la cultural y la digital, todas ellas protegidas por normas que garantizan el reconocimiento pleno de las personas ante el Estado y la sociedad. La Ley de Identidad de Género N° 26.743, sancionada en 2012, es un ejemplo claro de cómo Argentina continúa liderando avances legales en materia de derechos personales y reconocimiento de la diversidad.

El Día del Derecho a la Identidad no solo invita a recordar el pasado, sino también a reafirmar el compromiso con el presente y el futuro. En tiempos donde la tecnología redefine los límites de la privacidad y los datos personales, proteger la identidad —en todas sus formas— sigue siendo un desafío ético y jurídico de primer orden.

Cada 22 de octubre, la sociedad argentina celebra la persistencia de quienes se negaron a olvidar y reafirma que la identidad no es un privilegio, sino un derecho humano inalienable que el Estado y la justicia deben garantizar siempre.